La imagen de la Virgen Aparecida de Arenitas que presentamos aquí es la manifestación de la Virgen en un hueso que, según el testimonio de la población del Caserío de Arenitas, ubicado en la Parroquia de Cumbo, Estado Miranda, apareció en el año 1910, cuando un niño consiguió un hueso que él llamó su «Muñeco».
Este hueso se fue transformando en una imagen de la Virgen, en la cual resalta el color azul de su manto, la corona dorada y el rostro rosado que a veces se torma más pálido. Estos colores son manifestaciones naturales de su presencia, que se han definido desde que se comenzó a formar su imagen. En la parte de atrás aún puede verse el hueso que le dio origen.
Esta Virgen ha concedido muchos milagros y la población de Arenitas y sus adyacencias le tiene gran devoción y fe.
¡ Oh Madre, guíanos y concédenos la bendición de Dios Padre ! Amén
¡ Recemos el Padrenuestro y el Avemaría !