Caracas, Enero 25 de 2007
Apreciado Monseñor García Naranjo:
Como le estuve explicando por teléfono, cuando usted gentilmente me llamó, tengo toda la intención de dar a conocer la aparición de esta imagen de La Virgen que, según el testimonio de los pobladores del Caserío de La Arenita, ubicado en la Parroquia de Cumbo, Estado Miranda, apareció de un hueso que consiguió un niño en el siglo XIX, aproximadamente en el año 1897.
Esta imagen se fue formando en un período de casi veinte años y constituye para mi criterio un verdadero milagro, al igual que para otros creyentes, a pesar de lo poco conocida de esta manifestación de la Virgen. Yo le he prometido renovar mi fe y dar a conocer a nivel nacional y mundial esta aparición, para que otras personas se beneficien de los milagros que ella pueda realizar a nivel físico, tal como curación de enfermedades, tanto físicas como mentales; y, a nivel espiritual, con el crecimiento que nuestro Padre Dios Todopoderoso quiere, dicho con la palabra en boca de nuestro Señor Jesucristo, cuando le dijo a Nicodemo “Si os he dicho cosas terrenales, y no creéis, ¿ cómo creeréis si os dijera las celestiales ?
Tal vez, Padrecito, este sea un misterio como los que Jesús menciona sobre lo celestial. Para mí ha sido un renacer, una esperanza de una nueva vida, de una nueva tierra, al estar en presencia de la Virgen de La Arenita. En mi promesa, tengo como proyecto repartir estampitas, con base en la imagen de la foto que está en la Capilla de La Arenita, hacer una página Web y crear una Fundación, que tenga como objetivo resaltar los valores cristianos, morales, humanos, culturales y sociales, así como apoyar la evolución del espíritu en los seres más necesitados.
Para ello, me gustaría contar con su gran bondad, tal como me lo hizo saber el Canciller de la Curia Diocesana del Obispado de Los Teques, con quien tuve la oportunidad de conversar personalmente, y quien se refirió a su persona con mucho aprecio.
Por favor dígame cuando lo puedo ir a visitar para que hablemos personalmente. Monseñor García Naranjo, le ruego que no me deje sola en esta misión.
Por la gracia de Dios, Amor + Gratitud.
Soledad Yriza.
E-mail: solyluna769@yahoo.es